El camino
¿Acaso usted no se compadece de nosotros? Pobres soldados que cruzamos la selva como tigres o como zorros. El sol nos saluda cada mañana como…
¿Acaso usted no se compadece de nosotros? Pobres soldados que cruzamos la selva como tigres o como zorros. El sol nos saluda cada mañana como…
En las tonalidades de la noche se alcanzaban a distinguir los movimientos de su cola. Trataba de llegar a esos pasos que sus garras detectaban.…
Nos costó mucho trabajo hacernos, acostumbrarnos. Los días para mí, habituado a levantarme al alba e irme a la cama en cuanto la luz se…
Desayunábamos tranquilos cuando Camilo empezó a regañarme porque me había gastado los 500 pesos que me dio para comprar pan. En ese momento noté que…
A JC La prueba en bicicleta de 50 kilómetros era más de resistencia que de velocidad. Arrancamos en grupo. Montaña, carretera y ríos durante seis…
Buscó el vestido que le resaltaba la sonrisa. Se pulió los brazos hasta la refulgencia. Encontró en el espejo sus ojos teñidos en añil y…
Había decidido mantenerlo en secreto, sin embargo, cada noche me asomaba a la ventana para observarla detenidamente. Y ahí estaba: diminuta y brillante. Salía de…
Flota sobre el agua la flor, y río abajo la tarde desciende mañana los árboles silbarán en el incendio, ¿o será otra apacible noche?
¿Qué hora es? Me pregunta el señor al lado mío. Las doce menos cuarto, le respondo. El señor parece un poco angustiado, lo sé porque…
María se reencontró con José luego de 10 años. Tal vez debió intuir que la combinación de sus nombres estaba destinada desde que nacieron; el…
No me gusta reír. No le veo la gracia a nada de lo que ocurre por aquí. Ni siquiera la ingenua estulticia de don Martín…
Así será mañana, después de recibir tu costilla. Será justo cuando termine de preparar el pan y la mesa esté lista. Ahí, entre los siglos…
Marina observa con atención, y por varias horas al día, el afiche que pegó en la pared de la sala. Se lo compró en un…
«Lo primero que hay que hacer es dejarse de bobadas», me dijo mi madre cuando cumplí 7 años. «Olvídate de que las hadas existen, olvídate…
Era buena en lo que hacía gracias a la disciplina. Jamás comía ni más ni menos de lo debido. Le gustaba el control sobre sí…