Las cosas que son

No es que no me duela, no es que no me acuerde, no es que no hubiera pasado nada, es simplemente que así nací. Esa fue mi condición desde siempre.

La gente me describe como el que no tiene pie, no ven más que eso que creen que me falta, no saben que no me falta un pie: nunca lo tuve.

 

Loading
Leonora Alonso
Escritora. «Larga y ardua es la enseñanza por medio de la teoría, corta y eficaz por medio del ejemplo.» –Anónimo
Marrufo
Ilustrador. Cursa actualmente el Posgrado de Maestría en Diseño Gráfico y Comunicación Visual en la Universidad Nacional Autónoma de México en la Escuela Nacional de Artes Plásticas - Academia San Carlos. Ha sido becario de Maestría por la Universidad Nacional Autónoma de México.
Facebook
Anterior
Siguiente

No pares, ¡sigue leyendo!

Los matices de la pena

Pena

Amanece en color sentencia de muerte: oliendo a madre agonizante de aflicción y familia y amigos avergonzados. Quedó por ahí, una noche rancia…

El humor del oleaje (Nanonovela karmicotrágica)

Locura

I Lucio, un joven pescador, es obligado a trabajar como vendedor para la transnacional que lo despojó de su oficio. II En su…

Camino a casa

Primero fue la imagen

Alguna vez, hace ya algunos ayeres, quise entender qué pasaba con mi vida, con el mundo. Soñaba con pisar cada rincón de esta…

Un plan corporal

Error

Mi especialidad son las malas noticias. “Imelda, esa cerveza es la noche”; apenas levantó los ojos, hundidos ya, e intentó buscar su camino,…

Volver arriba