Skip to content

Ansiolíticos frente al espejo

Nadie nunca supo marcar con exactitud la línea que divide a los anhelos de las ansias.

A los sueños de la impaciencia.

Necesito dormir, necesito recordar cómo dormir.

 

 

Escritor. Hombre bueno, de mal genio. Escribo, leo, vendo, imagino y fumo cosas.

Anterior
Siguiente

No pares, ¡sigue leyendo!

Sin título

Vergüenza

Vacía la palabra queda Un cráneo de hojas envueltas flota La cruz de hielo de lo que siempre dijimos No quiero ser enterrado…

Volver arriba