Tengo encima de mí a esta mujer increíble. Mueve su cadera suavemente al ritmo que desea con la intención de hacerme terminar. Parte del contrato. Desnuda, es hermosa, más de lo que su atuendo prometía. El vestido, escotado en la espalda y abierto desde la cadera hasta el piso en ambos costados, trataba de distraer de una belleza distinta, más discreta, que brilla en sus ojos en forma de tristeza. Tengo una debilidad por las mujeres melancólicas e inaccesibles, no porque me interese rescatarlas de nada, sino porque pueden olvidarme fácilmente. Me gusta pasar inadvertido, ser un observador, incluso mientras estoy dentro de ella. Qué desprecio debemos sentir por el mundo y por nosotros mismos, aquí, enganchados en un placer pasajero, pasando el tiempo convenido sin hacernos preguntas, sin curiosidad alguna por el otro. Debajo del vestido, un brasier de raso sostenía sus pechos redondos y blancos como dos lunas firmes. Ahora se sacuden de arriba a abajo, desorbitadas, pero ella no cambia, su mirada es la misma: evidentemente, esta mujer no se encuentra en la habitación. Qué manera de desperdiciar su dinero.
Ulises Granados
Músico, escritor, lector, cinéfilo, melómano, hijo, primo, hermano y amigo nacido en la ciudad de México un hermoso y soleado miércoles 29 de febrero de 1984. Gusta de todas las formas de la imaginación y del humor sin discriminación alguna. También disfruta ocasionalmente de una buena novela policiaca. Sostiene que la escritura literaria es una búsqueda donde la voz del escritor debe ser la única constante. En alguna reunión llegó a afirmar: “Puedo suscribirme a cualquier corriente de pensamiento, siempre y cuando sea lo bastante corriente”.
No ha recibido ninguna distinción literaria, pero ha otorgado dos títulos de “Abuela Honoris Causa” hasta el momento. El primero a Susan Sontag por su labor crítica y, sobre todo, por esta fotografía; el segundo a Wisława Szymborska por su obra poética y por la persona que imagina detrás de esos poemas.
Participó en el proyecto de investigación de literatura policiaca “Crimen y ficción”. Actualmente escribe una columna mensual de cine para la revista Síncope, mantiene el blog “Antología (no tan) arbitraria de textos” y toca la guitarra en la banda mexicana de swing Cotton’s.
Herida de mujer
Cuando la niña terminó de leer las últimas páginas de un libro que nadie le había prohibido pero que sabía le estaba vedado,…
Camino a casa
Alguna vez, hace ya algunos ayeres, quise entender qué pasaba con mi vida, con el mundo. Soñaba con pisar cada rincón de esta…
Una cuestión personal
Metió la mano al bolsillo de la chamarra, sacó su escuadra Smith & Wesson de cañón recortado, le puso el silenciador y salió…
Semana inglesa
El dolor de espalda perenne. La mala noche. El hombro. Cualquier tiempo para el desayuno: escaso, rayano en nulo. A la mano y…




