Tal vez las extremidades no nos alcancen para mantenernos conectados entre este infinito de ideas.
Tal vez la semilla que sembraste en mi cabeza germine en forma de sueño y florezca en forma de idea.
Tal vez, y sólo tal vez, la planta derive en una gigante enredadera, así podríamos aprovechar nuestras largas piernas y brazos para llegar pronto a un lugar que podamos hacer nuestro.