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Insomnio

Entraste a mi vida cuando no había profundas tristezas, sólo tristezas.

Trajiste contigo la calma.
Convertiste mis deseos en realidades.
Abriste en mí camino.

Ahora, en medio de este pequeño insomnio turbulento, veo tu rostro dormido, escucho tu respirar sereno, lleno de sosiego, lleno de esa profunda calma.

Calma que yo no tengo.
Sosiego que me quita pensar en la muerte.
Calma que me dará la muerte.

 

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Ilustrador. Lo que nos da la propiedad de reyes o reinas es la vida misma y el hecho de que la vivamos personal e individualmente aun cuando sabemos que somos parte de un todo, aun cuando en los momentos más oscuros nos consuele saber que nuestras oscuras preguntas estén en la mente / espíritu / alma / esencia de otros. Esa virtud innata de vivir es fuertemente enriquecida con la virtud de dar vida, de ser nosotros mismos canales para la creación de nuevos mundos que se impongan a la cuestionante y finita realidad. Es allí donde creo confluir con este proyecto de creación colectiva, donde los ríos se cruzan aumentando su caudal para simplemente seguir irrigando (sí, también, por qué no, hasta llegar al mar).
Ilustrador. Ilustrador amateur de tiempo completo.
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