Skip to content

Un lugar

Tal vez las extremidades no nos alcancen para mantenernos conectados entre este infinito de ideas.

Tal vez la semilla que sembraste en mi cabeza germine en forma de sueño y florezca en forma de idea.

Tal vez, y sólo tal vez, la planta derive en una gigante enredadera, así podríamos aprovechar nuestras largas piernas y brazos para llegar pronto a un lugar que podamos hacer nuestro.

 

Loading
Escritor. Hombre bueno, de mal genio. Escribo, leo, vendo, imagino y fumo cosas.
Ilustrador. Soy Mauro Ruvalcaba, diseñador mexicano, amante del papel y las telas. Me gusta tejer cuando voy caminando, jugar a la cartomancia y andar en bici.
Anterior
Siguiente

No pares, ¡sigue leyendo!

Vacía

Infancia

Clara abre la puerta y ve a su abuela en el piano tocando a Agustín Lara y a sus tías cantando alrededor. Ve…

Volver arriba