… y así amaneció, con sus piernas abiertas sobre la sábana papel picado, y su sonrisa tan calavera y su perfume tan cempazúchitl …
Álvaro Buenaventura
Lleguemos a un acuerdo, tú me lees, yo te escribo.
«Había noches en que todo el mundo estaba como esperando algo y yo me sentía como un nómada fracasado, de esos que van a todas partes sin llegar a ningún lado.»
Escribo «adios» sin acento para que no suene a despedida.
Antón, el detective amateur
Lo comentó la noche anterior en el bar y todos, incluyendo a Gregorio el mesero, opinaron. «¡Pero es algo descabellado!», dijo Cristoph. «¿Y…
Los juegos del desOdio
Ella: Es tan común pelearnos, que hasta me aburre pensar que a veces te odio. Él: Sabías que tarde o temprano nos aburriríamos…
Sorprais
No, no es una iguana. Tampoco boletos. Neh, no son las botitas que vimos en El Chopo, ¡hasta crees! Si ves que ahorita…
Ilusiones
Ahí estaba nuevamente la joven aquella que no hacía más que llenarle de rocío los pensamientos esternónicos y salivosos. Parada en la barra…